En ese sentido, en el primer cuatrimestre de este año, elaboramos en forma de encuesta, y socializamos curso por curso para permitir y garantizar la mayor participación y difusión del proceso de reforma, una serie de puntos que consideramos fundamentales para la reflexionar del actual plan de estudio.
Ahora, como lo prometido es deuda, realizamos el análisis de las encuestas que fueron completadas por los compañeros.
Los datos que a continuación publicamos, serán luego presentados en la junta de carrera por nuestra consejera estudiantil, para que estos sirvan de aporte al equipo técnico de reformulación del plan.
Por otro lado, dejamos nuevamente a disponibilidad las encuestas para aquel que quiera completarla y participar.
El siguiente análisis procura dar a conocer aspectos cualitativos plasmados en las encuestas, sin descartar datos que nos den idea de los mismos desde lo cuantitativo.
Eje por eje:
Antes que nada, queremos comentar que el 90% respondió estar de acuerdo conque se reformara el plan de estudios; y si bien existen contenidos que se reiteran en una materia y en otra, la mayoría coincidió que no debería ser reducidas la cantidad de materias, sino, revisar los contenidos de las mismas, sobretodo de las metodológicas, y revisar el sistema de correlatividades.
1) En la encuesta se preguntaba acerca de sí se consideraban necesarios nuevos contenidos en las materias, o no, y cuáles deberían incorporarse. Estas fueron las propuestas:
Teoría Política – Estadística - Macroeconomía/ Economía - Historia: Argentina, Latinoamericana, Contemporánea - Educación popular - Género - Derecho II – Psicología-
Vale resaltar que las materias mayormente mencionadas fueron Historia y Economía.
También se mencionaron otros contenidos, temáticas consideradas importantes de incorporar, como: tercera edad, cooperativismo, autogestión, pueblos originarios, trabajo interdisciplinario.
2) Otro eje importante de destacar de la encuesta está ligado a la cuestión de la articulación entre las materias de contenido teórico- metodológico con la práctica pre- profesional. Estas fueron las respuestas de quienes han cursado por lo menos el nivel de Taller II, y que pudieron dar cuenta de este punto: el 66,6% respondió que ésta articulación no se daba, o si se daba era de manera casual. O sea, la articulación teórica- metodológico y la práctica dependían en tal caso, del centro de prácticas que se pudo anota, de la cátedra realizada de las materias metodológicas, de la actitud del docente del práctico de talleres, etc. Es decir, no es claro que exista de manera programada la articulación necesaria entre las materias teóricas- metodológicas y los talleres con sus respectivos centros de prácticas. El 34% restante, respondió que dicha articulación era posible, reconociendo haber hecho consultas sobre cátedras y comisiones, previamente a la inscripción.
Los encuestados pensaron distintas propuestas para mejorar esta articulación:
- redireccionar el sistema de correlatividades: orientar la realización de Metodología I para hacer Taller III y orientar la realización de Metodología II para hacer Taller IV
- revisar contenidos de las materias metodológicas,
- orientar el material teórico de los talleres según la problemática a abordar por los centros de prácticas, etc.
3) Con relación al punto anterior, también evaluamos cuáles se creen que son los componentes de la práctica pre- profesional que actúan como facilitadores y/u obstaculizadores. Este punto podía tener más de una respuesta:
La mayoría coincidió en que los elementos obstaculizadores son: centro de prácticas, referente institucional, y la propuesta de trabajo de taller.
La mayoría coincidió en que los elementos facilitadores son: grupo de trabajo, docente de taller.
De esto se desprenden varias cuestiones a tener en cuenta. El debate acerca de las prácticas pre- profesionales y la organización de los centros de prácticas, tiene larga data, y son varias las posiciones respecto al tema y las propuestas para el mismo. Carreras de Trabajo Social de otras Universidades del país incluso han adoptado diversas formas de implementación de sus prácticas: las denominadas "prácticas integrales", en donde estudiantes de diferentes niveles de taller trabajan juntos en equipo, o proyectos propios de las Facultades en el cual se integran a los estudiantes de trabajo social junto con otras disciplinas para la intervención comunitaria; entre otros ejemplos que se pueden mencionar.
En nuestra Facultad la carrera de Trabajo Social también ha implementado diferentes modalidades, diferentes propuestas pedagógicas para los Talleres; sin embargo, al día de hoy seguimos encontrando dificultades diversas, ya sea a nivel pedagógico, de articulación de contenidos teóricos- prácticos, como a nivel de organización de los centros de prácticas.
Como podremos ver, este punto que creemos crucial cuestionar para poder llevar realmente un cambio positivo y profundo en el actual plan de estudios de nuestra carrera, requiere a su vez, contar con los elementos y herramientas pertinentes para su tarea. Las frases o propuestas declamativas lejos de construir una propuesta posible, seria, y responsable, no hacen más que quedar en lo demagógico, y poco sirven a la hora de la práctica.
Pero, por otro lado, creemos también que en algunas cuestiones se pueden ir avanzando. Por ejemplo, este año a partir de la propuesta presentada en la junta de carrera, conseguimos que la inscripción a los centros de prácticas sea de manera simultanea a la inscripción de materias, evitando que como sucedía años anteriores, perder la posibilidad de inscripción a los talleres, por el entrecruzamiento de horarios con las materias teóricas.
Este año, además, presentamos en la junta de carrera un proyecto para que en el momento de inscripción a los centros de prácticas, se siguiera el criterio de prioridad para quienes trabajan; entendiendo que el compañero que se encuentra en esta situación tiene su oferta de horarios mucho más reducida, que aquel compañero que aún no está en situación laboral. Este proyecto que fue aprobado en el consejo directivo pero aún no ha sido implementado, creemos que aportaría lo suficiente como para evitar el clásico de todos los comienzos del año, en donde nos encontramos con muchos compañeros que no han podido conseguir centro de práctica. Esperamos que la carrera pueda ver la pertinencia de nuestra propuesta y su consideración.
4) Taller I cuatrimestral
Teniendo en cuenta la propuesta pedagógica de trabajo de taller I, planteamos las posibilidades de cursar dicho taller manteniendo la misma cantidad de horas pero distribuidas en un cuatrimestre. Acerca de este punto distintas opiniones surgieron:
El 60% esta de acuerdo, ya que considera que de esta forma, los compañeros que ingresan a la carrera a partir del 2º cuatrimestre del año, tendrían las posibilidades de cursarlo. Además, por otra parte, consideran que los contenidos y objetivos de este nivel de taller pueden llegar a cumplirse en el plazo de un cuatrimestre, como otras materias teóricas, ya que aún en este nivel de taller no se ha iniciado con las prácticas.
El 30% no está de acuerdo, debido a que consideran que su experiencia de taller fue positiva, y por otro lado, se plantea que en los casos de aquellos compañeros que realizarían el taller I en el 1º cuatrimestre, se encontrarían en la situación de "desconexión" respecto de la práctica hasta comenzar el siguiente año.
El 10% plantea dudas considerando sus aspectos positivos y negativos.
En relación a lo propuesto para Taller I en la junta de la carrera presentamos un proyecto para que los exámenes recuperatorios del 1º parcial se tomen antes del comienzo del 2º cuatrimestre; y no a fin de año junto con el recuperatorio del 2º parcial, ya que muchos compañeros al desaprobar el primer parcial y su recuperatorio pierden la posibilidad de cursar otra materia en el segundo cuatrimestre.
El proyecto posiblemente pase a comisión para su tratamiento.
5) Investigación en TS
Las preguntas que se realizaron en la encuesta respecto a la investigación y su lugar dentro del plan de estudios, tuvieron en su mayoría respuestas positivas respecto a la formación que otorga el actual plan de estudios de la carrera para la investigación.
6) Planificación de políticas públicas en TS
En relación con el punto anterior, acerca de la investigación, también nos pareció importante conocer la opinión de los compañeros respecto a la pertinencia de las herramientas que otorga el actual plan de estudio para insertarnos y desarrollarnos en el ámbito de la planificación de políticas.
El 60% considera que hace falta más contenido, complementariedad, ya que no son suficientes las materias para pensarnos en el diseño de políticas que impliquen mayor alcance y de largo plazo. Muchos compañeros en este punto plantearon la necesidad de tener materias como macroeconomía, teoría política, estadística. El 25% respondió que consideraba pertinente el contenido para dicha intervención, y un 15% ns/nc.
En este sentido proponemos realzar nuestro lugar como futuros trabajadores sociales en el desarrollo de políticas públicas, desde su planificación y diseño.
7) Intervención del TS en áreas problemáticas.
Existen un vació respecto a algunas áreas de intervención en nuestra formación actual. En este sentido, compañeros avanzados de la carrera propusieron temáticas a abordar: Educación- trabajo- cooperativismo- salud- vivienda- 3ºedad- Trabajo interdisciplinario
8) Con relación a este punto, propusimos en la encuesta también pensar la alternativa de cursar materias optativas que permitan la formación en determinada área problemática, es decir tener como opción la posibilidad de elegir una orientación. Por ejemplo: elegir cursar cuatro materias optativas de la orientación en salud; o de la orientación en educación; o en trabajo; o en políticas públicas; o en investigación. O bien, cursar materias de diversas problemáticas, como es actualmente el programa. El 90% respondió estar de acuerdo con esta propuesta. Este régimen de cursada de materias optativas con orientaciones existe actualmente en otras carreras de nuestra Facultad.
Respecto a estos últimos puntos de nuestro análisis, y como conclusión de este informe, quisiéramos hacer una breve reflexión acerca del Trabajo Social como ciencia, como cocimiento para la intervención, como herramienta de transformación social...
Teniendo en cuenta nuestra inserción en el campo de lo social y la especificidad de nuestra profesión, que permite un conocimiento y estudio de las vivencias cotidianas de las personas, proponemos que nuestra inserción en lo social vaya más allá, que apunte hacia la construcción de una Teoría del Trabajo Social, que como en "un ida y vuelta", a su vez permita superar ese rol subalterno frente a otras ciencias sociales. Pero esta subalternidad no existen solo en el campo de las ciencias, de la investigación, sino también en la intervención macrosocial, es decir en la planificación de políticas públicas. Para esto se hace necesario fortalecer nuestra producción de conocimiento como colectivo profundizando nuestra inserción en equipos de investigación, con el fin de poder construir el sustento teórico necesario para poder definir las problemáticas sociales en las que intervenimos, repensar las formas en que son abordadas, como así también ir elucidando nuevos campos problemáticos.
Se trata de revalorizar aquellos conocimientos, que por medio de la interacción teórico- práctica, nos permite un acercamiento concreto a las necesidades de nuestros pueblos. Se trata entonces de elevar la voz en espacios de gestión, repensando nuestra formación, profundizando aquellas asignaturas de planificación, políticas sociales y públicas, y la articulación entre las materias teóricas y las metodológicas; hacer de la investigación conocimiento para la intervención y para un accionar ético, político y transformador.
Cátedras paralelas, oferta de horarios de materias turno mañana y distribución de la oferta de materias en la semana.
Un tema siempre pendiente, no sólo en TS, sino también en cualquiera de las otras carreras de la Facultad, está ligado a la cuestión de la oferta de cátedras. Sin caer en la discusión simplista, y comprendiendo que existen múltiples variables tanto políticas como económicas, que hacen que aún existan cátedras únicas, y que la oferta de horarios turno mañana sea reducida, entre otras cosas; creemos que algunas cuestiones se pueden cambiar. Por ejemplo, es notoria la concentración de oferta de materias correspondiente al tronco obligatorio de la carrera en los primeros días de la semana (lunes, martes, miércoles), y llegando a los días jueves y viernes, se reduce significativamente provocando dicha situación que muchos estudiantes no puedan cursar determinada cantidad de materias ya que se entrecruzan los horarios en los tres primeros días de la semana (y si además a esto le sumamos la situación de aquellos que trabajan, esto es más problemático).
Creemos que con planificación, previsibilidad y voluntad, esto se podría cambiar distribuyendo de manera conveniente horarios y días de la oferta de materias, y así mejorar las condiciones de cursada y calidad educativa.
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